BESTIARIO MEDIEVAL
El bestiario medieval es un conjunto de bestias imaginarias o fantásticas. Aparece como motivo escultórico durante el románico en capiteles, tímpanos, canecillos… Sabemos su significado gracias a los códices conservados, en los que aparecen dibujos de las bestias junto a una explicación.
Del trabajo de los animales se extraen fábulas moralizantes que aluden a vicios y virtudes. Teniendo en cuenta que la mayor parte de la población era analfabeta, y lo monstruoso de esas figuras, estas debían causar un gran efecto intimidatorio sobre la mayoría de la población. Estos son algunos ejemplos:
ELEFANTE: representa la castidad porque es un animal que carece del deseo de copular, pariendo solo una vez y solo una cría. Se ha identificado con Adán y Eva antes del Pecado Original.
LAGARTO: el lagarto cuando envejece se queda ciego, sin ver el sol, y se resguarda en una grieta, donde luego, recupera la visión. Se identifica con el creyente que cuando peca, si se arrepiente, vuelve a alcanzar la grandeza de Dios.
El LEÓN representa la nobleza y la fuerza, actuando junto con los GRIFOS y águilas como guardianes de los templos. Por este motivo, se suelen colocar en las portadas.
SIRENA: engañan a los marineros con su dulce canto, relacionándose con la vanidad. La moraleja es que siempre queremos oír cosas buenas sobre nosotros mismos, y esto conduce al castigo. Tanto la sirena como la ARPÍA representan la seducción por los placeres carnales.
Otros animales son el MONOS, con cuerdas y atados, como caricatura grotesca del hombre, la serpiente, símbolo del pecado y el demonio, la liebre y el conejo asociados con la lujuria por su fertilidad, el jabalí y el CERDO (en la imagen aparece vestido de hombre) por ser lujuriosos, sucios y perezosos…
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